Tengo un sinfín de listas de lectura. Apunto novedades. Apunto recomendaciones. La lista crece y crece. Pierdo las notas con las recomendaciones bibliográficas que recojo. Me da rabia que ocurra, pero sucede. Entonces, me enfado. Cambio de estrategia: me guardo las recomendaciones en otra lista infinita de favoritos en las redes sociales. Me parece una gran idea, pero, una vez más, se me pasa consultarla. Es una lucha continua que no acaba.
Por eso, esta vez, usaré el recurso del blog. Quizá, así, baste con darle a un botón para recurperarlas. Quizá, así, también, te sirvan a ti. Es una lista que ha surgido de las múltiples gentes lectoras a las que sigo por las redes sociales. Mi agradecimiento para ellas por dejar estas pistas.
Títulos apuntados en este primer semestre de 2022
Hija de inmigrantes de Safia Al-Aadam en Nube de tinta. Se trata de una novela de literatura juvenil.
El buen padre de Nadia Hafid en Roca editorial. Una novela gráfica sobre la identidad. Sobre lo que significa vivir entre dos mundos.
El Profeta de Khalil Gibran publicado por el Zorro Rojo. Una obra más que clásica que, diría yo, cuya edición no sé si se ha cuidado mucho hasta ahora. (Yo tengo una antigua de tapa dura con portada con motivos orientales comprada en un montón de libros). En cualquier caso, la editorial Zorro Rojo le ha encargado su ilustración a Rachid Koraïchi y, de verdad, que le ha quedado bien bonita.
La hija pequeña de Fátima Daas en Cabaret Voltaire.
Supersaurio de Maryem El Mehdati en Blacki books. El otro día, leí una entrevista a la autora y, dada mi edad, me hizo pensar en la cantidad de mundos coincidentes que conviven en un mismo espacio tiempo. Es curioso y divertido.
El invierno de los jilgueros de Mohamed El Morabet en Galaxia Gütenberg. Esta novela es premio novela de Málaga. Su sinopsis se me hace atractiva. Probablemente, será lectura de este largo verano que tenemos por delante.
El castigo de Tahar Ben Jelloun. Una novela sobre los años de plomo en Marruecos.
Desenllaços de Sara Touri. Lo siento, no puedo resistirme a los relatos breves. Me gustan mucho que me cuenten cuentos y saber cómo es el mundo de otros.
Al-Tanki de la iraquí Alia Mamduh. Una novela que nos cuenta la Bagdad de la infancia de la autora. No he sido muy propensa nunca a leer memorias o diarios, pero me hago mayor y, quizá, he empezado a contemplar las cosas desde otro prisma.
Saâda la marroquí de Elissa Raïss en Editorial Renacimiento. Esta es el último apunte que he hecho. No recuerdo cómo ha llegado a mí, pero sé que la lectura de su sinopsis me ha atraído y, con toda probabilidad, también será lectura de verano.
Un mes en siena de Hisham Matar. Después de leer Solo en el mundo, creo que no me queda más remedio que hacerme con esta historia.
Y hasta aquí este listado semestral de lecturas pendientes en lo que atañe al tema del blog. Si tienes alguna recomendación, es bienvenida. Antes de rematar este post, comento que he descubierto el Club de lectura: Con(fines) culturales. Quizá, a alguno de los que leéis estas líneas os resulte de interés.
¡Nos leemos pronto! In sha’ Allah!
Separata Árabe 