Selección de recursos para comenzar a famliarizarse con el alifato.
Una de las recomendaciones que están dando estos días de cuarentena -no me puedo creer que ya sean 18- es que aprendas un idioma nuevo. Y, claro, ¿qué voy a proponer yo? Pues que aprendas árabe. ¿Por qué no? Es una lengua hermosa que te trae algún dolor de cabeza -ja, ja, ja-, pero su belleza los compensa con creces. Así que, ya bien tengas curiosidad por su grafía – a lo mejor, te apetece fardar con los amigos de que sabes escribir su nombre – o ir un poquito más allá, dejo por aquí algunos recursos que estos días puedes utilizar.
Si quieres aprender á leer en árabe y a familiarizarte con las grafías, estas clases de alfabetización de la televisión marroquí son estupendas para ese fin.
Este recurso lo compartió Anís del moro en su página de Facebook y, sinceramente, me parece de lo más útil que he visto en mucho tiempo. Da para mucho, tanto si eres alumno como si eres profesor. Tanto si estás a uno u otro lado de la clase viene de perlas. (Lo digo porque normalmente los alumnos están frente a la pizarra y el profesor delante de ella siendo el ejemplo y modelo a seguir).
Si normalmente encuentro un montón de material interesante para ir desarrollando las competencias lingüísticas en árabe, con la llegada de la pandemia y la suspensión de las clases, aún hay muchos más materiales online.
Mucha gente se ha apresurado a poner en marcha las clases online para sus alumnados y ahora, por suerte, los demás podemos verlas también. Este es el caso de las clases que están ofreciendo para los alumno saudíes que están confinados en sus casas y que ahora reciben las clases vía directos en Youtube.
Eso nos brinda la oportunidad de conocer cómo funciona otros sistema educativo, qué contenidos de imparten en las distintas materias y cuál es su enfoque. Así puedes hacerte una idea, por ejemplo, de qué se estudia en las clases de historia y el enfoque que le dan. De modo que puedes aproximarte mucho mejor a qué conocimientos básicos se imparten y, por tanto, comparte esa comunidad.
Por supuesto, para quien sabemos árabe (o lo pretendemos) también nos da una ocasión maravillosa de trabajar nuestra competencia de comprensión oral y, por qué no, lectora porque tienes que descifrar los escritos. En este caso, incluso puedes poner a prueba esas competencias porque los profesores proponen ejercicios y los corrigen, así que puedes comprobar si lo has resuelto bien o mal.
En definitiva, es un material interesante si obviamos también la propaganda, que es inevitable en este caso. Aquí abajo te dejo las clases: son de matemáticas, lengua árabe, literatura, historia, etc.
Aayn durus (عين دروس)
Espero que este material esté disponible más allá de esta cuarentena para tener tiempo de investigarlo un poquito.
Es imposible sustraerse a la pandemia provocada por el COVID-19 porque, además de que nos ha dado de lleno tampoco podemos olvidar que como acabo de escuchar hace unos minutos: es la primera epidemia que nos afecta de forma global.
Escrito donde explico algunas de las cuestiones que me hubiera gustado saber a la hora de aprender árabe.
Si tuviera que estudiar árabe ahora, sin duda, lo haría de forma diferente (bien es verdad que ahora tengo la perspectiva docente de la enseñanza/aprendizaje de un idioma). Sería totalmente diferente, no solo porque ahora tengo más herramientas, sino porque, simplemente, ahora sé mucho más sobre este idioma. A lo mejor, asombra esta afirmación viniendo de una licenciada en filología árabe, pero, si conoces los entresijos de esta formación, quizá no te parezca tan descabellado.
Mi nombre es Thais Pintor y soy salmantina, el primer paso fue Túnez, ahora vuelo un poco más lejos. Siguiente destino: Egipto. Estudiar árabe en España fue "fácil", enfrentarme a la inmersión lingüística, no tanto.